miércoles, 30 de abril de 2008

Superar la desaceleración





La desaceleración del sector de la construcción está haciendo que la creación de empleo en el resto de sectores sea insuficiente, para compensar los que se pierden y los que demandan las que se incorporan al mercado de trabajo.

La preocupación por el desempleo puede hacer que, a veces, no nos ocupamos del empleo.

¿Hay alternativas a la crisis del ladrillo? Sí. Incluso algunas ya se están construyendo y están dando resultados, como corroboraba la última encuesta de población activa. No obstante, es conveniente acelerarlas.

Las economías regionales donde la industria tiene un peso mayor, han sufrido menos, algunas, incluso, han creado empleo neto.

Así pues, la senda es continuar mejorando nuestro tejido industrial con productos de más valor añadido y con una forma de producirlos más competitiva. Incorporar conocimiento a lo que se hace y como se hace, funciona.

Eso significa invertir para que los sectores maduros no se queden obsoletos y que se apueste por sectores con unos amplios contenidos tecnológicos y relacionados con salud, medio ambiente, energía y tecnologías de la comunicación y la información.

Por otra parte, el stock de casas sin vender, no es la expresión de la satisfacción de las necesidades de vivienda. Más bien es todo el contrario. Hay un exceso de casas construidas donde no está la gente (segundas residencias y zonas turísticas) y las que están ubicadas donde hay demanda no cubierta, están a unos precios que no se ajustan a las posibilidades de los compradores.

La solución del sector de la construcción es, junto con la rehabilitación y la obra pública, ajustar los precios a la demanda real y que la vivienda nueva responda, en precios y ubicación a ella y no a la especulación de los sectores financieros.

Otra línea de actuación consiste en incrementar los servicios de calidad para empresas y personas. Se crea empleo, al tiempo, que se satisfacen necesidades no suficientemente atendidas.

Estos son los deberes de los gobiernos y la sociedad para superar la desaceleración.

En definitiva, se trata de ocuparse del empleo, sin desatender a las personas desempleadas.

jueves, 24 de abril de 2008

Coherencia y participación



¡Gracias Marcelino Iglesias!

Es la primera expresión que me ha salido, cuando le oído decir, en menos de 10 segundos pero con toda claridad y juicio, que estaba de acuerdo con la solución que se está dando al problema de la sequía que sufre el área de Barcelona, porque:

"El agua que llegará al área de Barcelona no es un trasvase nuevo, forma parte del autorizado en el año 1981.

No hay nuevas extracciones del caudal del Ebro.

Es la solución para atender una emergencia.

Es temporal, hasta que entre en marcha la solución definitiva - la que defendemos parar las zonas áridas del Mediterráneo - la desalación del agua del mar"



En estos 10 segundos, también me han venido en la cabeza la actitud de aquéllos que:

Como CiU, dicen que la cañería la propusieron ellos cuando estaban en el Gobierno, pero ni la construyeron, entonces, ni le dan apoyo, ahora que están a la oposición.

Como ERC, que en nombre de la coherencia irá a una manifestación en contra de una medida, que le dan apoyo desde el gobierno.

Como ICV-EUiA, que en nombre del fomento de la confianza en la política y los políticos defiende desmontar una parte de la cañería, cuando la temporalidad y finalidad está fijada por una ley y por el gobierno del que forman parte.

Gracias Marcelino Iglesias, porque con tu posición nos ayudas a continuar hiende aquello que la gente necesita y quiere. Que se resuelvan los problemas entendiéndolos, atendiéndolos y construyendo al mismo tiempo el futuro que les permita progresar.

Al socialismo catalán nunca le ha dado miedo decir y hacer lo que toca, pero a veces cuando se está rodeado de tanta "coherencia y participación", que sirve para despistar a propios y extraños, encontrar una voz amiga que exprese con tanta claridad las razones por las que haremos esta cañería, reconforta.

miércoles, 23 de abril de 2008

Preparación

Preparémonos para la que se nos caerá encima. No me refiero a la esperada lluvia, sino a la tensión política, que querrá generar el PP.
¿Con la que han montado por la cañería que garantizarán el agua de boca para más de 5 millones de personas en Cataluña, qué no montarán cuando se inicie la negociación sobre la financiación autonómica?
De nuevo, hemos tenido que oírnos decir que el Gobierno de España discrimina en otras regiones cuando atiende una necesidad ineludible de los ciudadanos de Cataluña, en este caso el agua, porque no les da el mismo trato. Para ellos es indiferente que se hayan hecho cosas similares (Murcia o Baleares) ante problemas hídricos similares, lo importante hacerse el ofendido.
El derogado Plan Hidrológico Nacional (PHN) y lo que ahora se hará no tienen nada ver. El primero era una acción estructural y permanente y la cañería es una actuación coyuntural que busca asegurar, hasta mayo del 2009 y en caso de necesidad, la superación de los efectos de sequía.
Lo que, ahora, es estructural son las tres desaladoras, que al final aportarán 180 Hm3/año, sustituyendo con eso los 190 Hm3 que se querían traer temporalmente desde el Ebro hasta Barcelona.
Ciertamente, en el futuro, la cañería se aprovechará para distribuir, hacia Tarragona o Barcelona, el agua de la desaladora de Cunit. Por esta razón, ni se tirando el dinero, ni se tiene que desmontar.

El discurso de los Presidentes del PP, que gobiernan en Valencia y Murcia, que confunde el PHN y la cañería no parte de la desinformación, sino de otras razones, quieren reivindicar el PHN, atacar a los gobiernos de España y Cataluña y, de paso, "preparar el terreno para la negociación" de la financiación autonómica.
Por eso, resulta preocupante lo "corto de miras" políticas que es CiU. Con su "tacticismo" fortalece esas posiciones. Con su obsesión por excusarse de su anterior aceptación en el PHN, se niega a apoyo a las soluciones para la sequía y, además, se suma al discurso que favorece la confrontación territorial.

Si en un tema como éste, actúa así, poniendo el intereses de partido por delante del país, y da una fría respuesta al ofrecimiento del Gobierno para andar juntos en el proceso de negociación de la financiación.
Entonces, más vale que nos vayamos preparando.

miércoles, 16 de abril de 2008

Solucionar la sequía



Por fin, ya hay una solución para los efectos de la sequía.

El Gobierno de Cataluña hace tiempo que está construyendo la solución definitiva, para cuándo las lluvias fallan. Fomenta el ahorro, la reutilización y el uso racional del agua, aprovecha los recursos naturales (ríos y acuíferos), construye las desaladoras del Prat, La Tordera y Cunit-Cubelles y conecta las redes, para que ninguna cuenca sufra los efectos de la sequía.

No obstante, mientras todo eso llegaba, había propuesto medidas de urgencia, como el recurso puntual y temporal al Segre. Ésta medida no ha sido necesaria.

El diálogo y el acuerdo con el Gobierno de España ha hecho posible aprovechar otra de las opciones que había estudiado. El ofrecimiento para construir por la zona de influencia de la Autopista AP-7 la canalización que transporte los 40 Hm3 que no utiliza Tarragona, de los 120 Hm3 que se compran a los regantes del Ebro, ello permite hacer llegar el agua que se necesita en tiempo y cantidad. Esta opción es posible porque no se tienen que expropiar los terrenos, pues en que a su día ya lo hizo el Estado, y entonces el tiempo de realización se recorta desde los 21 meses previstos inicialmente a los 6 meses, de la nueva previsión.

Ya hay solución para la sequía que sufren los 5,5 millones de personas que viven a las cuencas del Ter y del Llobregat. Pero CiU no da su apoyo a la misma, la condiciona al faraónico proyecto del trasvase del Ródano.

¿Quiere decir eso que CiU, después de 23 años de gobernar Cataluña, es incapaz de entender cómo se tiene que afrontar una emergencia? No, lo que significa es que no quiere mojarse.

Artur Mas sabe que establecer un condicionante a largo plazo, como hacer el trasvase de agua del Ródano, para dar su apoyo a una solución a corto, no es una alternativa real, pero la utiliza como maniobra de distraccción.

Cree que evitar la coincidencia con el Gobierno, le permitirá continuar con su estrategia de defender, en cada parte del territorio, aquello que se imagina que la gente quiere oir, en Tarragona que el Ebro no se toca, en Lleida el Segre y a Girona el Ter.

Piensa que la gente no se dará cuenta de que ha sido el Gobierno de Cataluña, con el Presidente Montilla al frente, quién le ha resuelto su problema de falta de agua.

Malbaratar otra oportunidad para comprometerse y optar por hacer partidismo con las necesidades de los ciudadanos, no ha sido nunca una forma de liderar la construcción de una alternativa, y mucho menos un país. ¡Ya se lo harán!

miércoles, 9 de abril de 2008

Emergencia

Lo urgente es afrontar la emergencia hídrica.

Vivimos la sequía más importante de los últimos 60 años. Hasta que funcione la desaladora del Prat podemos entrar en una grave situación de desabastecimiento, si no llueve. Por eso, resulta urgente sumar a las medidas que ya se han tomado, todas las necesarias para evitarla.

Hoy pues, lo urgente y lo importante coinciden.

En este tema no hay UNA solución, sino soluciones. Por eso, todas las propuestas se tienen que dirigir a conseguir que en las cuencas del Ter y del Llobregat, donde viven 5'5 millones de personas, haya agua en cantidad suficiente, en el tiempo adecuado y a un coste económico, social y medioambiental aceptable.

Lo que se sitúe fuera de plazos, no sirve y las propuestas que no aporten el caudal necesario, tampoco, o, en todo caso, no pueden ser excluyentes de de otros, hasta que se alcance el objetivo total.

Por eso resulta extraño, ver cómo Artur Mas condicionó su apoyo a las medidas de urgencia planteadas por el Presidente Montilla a la aceptación de su opción al trasvase del Ródano, de la cual tanto hablaron, pero nunca hicieron.

De momento, su "solución" llegaría tarde. Como muy pronto, entre 7 ó 10 años. ¡Y las soluciones son para ya!

Pero es que, además, tiene esa propuesta tiene problemas, como por ejemplo, la contaminación del río, las necesidades de respetar el parque natural que atravesaría, la preferencia de suministro en las zonas francesas, con problemas de agua, por donde pasaría y la extensión de los regadíos que te proyectas por ellas. En una palabra, en caso de hacerse, nos tendríamos que poner en la cola del agua.

La grandeza y generosidad de las fuerzas políticas, tanto las del gobierno como las de la oposición, se expresa "arrimando el hombro" para afrontar las emergencias y renunciando a los réditos electorales a corto.

Ni los proyectos a largo, ni los vetos a propuestas sin proponer soluciones factibles, pueden ser las excusas para no comprometerse en la solución de la emergencia, porque nadie entenderá que se haga electoralismo con sus necesidades básicas.

miércoles, 2 de abril de 2008

Decidir en verano

Este verano será decisorio, está para ver si también será decisivo.
De entrada todo apunta a que lo pueda ser, pues algunas de las fuerzas políticas catalanas más importantes, como PSC, CDC y ERC, tienen convocado su congreso. A última hora el PPC también se ha apuntado, adelantando el suyo desde octubre en julio.
Con los primeros calores del verano se reunirán para reflexionar y si es posible decidir. Tienen situaciones diferentes, pero hay alguna cosa en común.
Todos debatirán entre continuidad y renovación, o en qué proporción se tienen que combinar estos dos conceptos para redefinir su propuesta política, después de comprobar el veredicto que las urnas le han otorgado a cada uno. Veredicto que, éste sí, ha sido diferente por unos y otros.
Todos lo tendrán que hacer. De los nacionalistas catalanes, ERC y CDC, diría que todo el mundo lo espera, ya que los resultados electorales no los han acompañado. También se espera de los nacionalistas españoles, PPC, pues
la debilidad de una dirección y una estrategia potenciada, desde fuera de Cataluña, para Acebes i Zaplana, los cuales personifican la pérdida de las elecciones, lo hacen imprescindible.
Pero del PSC, no se espera que hagamos este ejercicio. Hay quien desde dentro y desde fuera, incluso, piense que no lo necesita, porque lo estamos ganando todo. Que si una cosa funciona no conviene tocarla. Se equivocarán. Si a los socialistas catalanes las cosas no nos han ido mal es porque siempre nos ha caracterizado el hecho de no esperar a que las cosas se estropeen, a perder, para empezar a cambiar proyectos y personas. Ésta es la actitud que no tenemos que cambiar.
Los cambios en las alcaldías, por ejemplo, en su un testigo. Parece fácil, pero no lo es. Cambiar cuando está en el gobierno, aunque los adversarios nos lo critiquen, no resulta nada sencillo. Tiene su mérito.
Porque no se trata sólo de no actualizar las caras, sino los planteamientos y las propuestas. Eso es lo sustancial. Si sólo se hiciera el primero, sería una lífting y no el necesario proceso de incorporación y renovación generacional.
Nuestra obsesión tiene que continuar siendo la auscultación de la sociedad, para interpretar sus cambios y sus anhelos, para detectar sus nuevas posibilidades, que provienen de una transformación que, en muchos casos, hemos ayudado a protagonizado y liderar. Esta obsesión tiene que ser paralela a nuestra vocación de actualización y renovación de nuestras propuestas y de nuestros liderazgos. Esta obsesión no es gratuita, es la que nos ha permitido obtener la confianza mayoritaria de la ciudadanía.
¡Si eso es cierto, para el PSC, no lo será para CDC, ERC y PPC!
De los diferentes procesos congresuales saldrán reforzados aquéllos que sean capaces de entender y de atender el mensaje que los ciudadanos nos han enviado con sus votos y lo antepongan a sus "cocidas" internas. Los que no lo hagan así, perderán lo que quizás sea su último tren.